El blanqueamiento es uno de los tratamientos estéticos más demandados, pero también uno de los que más dudas genera. Entre mitos de redes sociales y productos “milagro”, es importante saber qué funciona y qué no.
Mito 1: Las pastas blanqueadoras blanquean de verdad
FALSO. Solo eliminan manchas superficiales. No modifican el color interno del diente.
Mito 2: El blanqueamiento daña el esmalte
FALSO. Los blanqueamientos profesionales, realizados con supervisión, son seguros y respetuosos con el esmalte.
Mito 3: Los resultados duran para siempre
FALSO. Duran meses o años, dependiendo de tu dieta y hábitos. Café, té, vino tinto y tabaco aceleran la pérdida de brillo.
¿Cómo se hace un blanqueamiento seguro?
- Primero, revisión para descartar caries o sensibilidad.
- Limpieza profesional y pulido previo.
- Aplicación de gel blanqueador en consulta o férulas personalizadas en casa.
- Seguimiento para garantizar resultados homogéneos.
Consejos para mantener el resultado
- Reduce bebidas oscuras.
- Usa pajita en bebidas pigmentantes.
- Evita tabaco.
- Refuerza tu higiene oral.
Un blanqueamiento profesional puede mejorar tu sonrisa sin riesgos y con resultados naturales.
